No importó la plaza para demostrar el nivel al que pueden llegar. En Andújar se juntaron tres generaciones que evidenciaron hasta dónde pueden llegar. Enrique Ponce, torero de toreros, templó, obligó y pulseó la embestida de forma milimétrica; Cayetano puso las ganas con el lote más a la contra; y Roca Rey pisó el mismo terreno que en cualquier otro lugar. Su compromiso le hizo que en el arrimón final sufriera una tremenda voltereta que le mandó al hospital.
Roca Rey dejó su impronta en Andújar. Faena de épica e importante de toreo ante el tercero un toco complicado pero con el que el peruano estuvo completo tanto con el capote como con la muleta. En el primer tercio quitó por tafalleras y ajustadas chicuelinas para después, con la franela, torear al ralentí. En el tramo final, cuando estaba realizando su habitual arrimón, fue prendido de forma violenta y ya en el ruedo, volvió a ser empalado en la zona del recto. Con rapidez fue conducido a la enfermería pero salió para matar de una gran estocada. Inapelable, dos orejas y rabo.
Enrique Ponce recibió con lucimiento al primero a la verónica. Tuvo calidad y nobleza el de Salvador Domecq en una faena pulseada, a media altura, en una faena que fue creciend sobre la mano derecha. El valenciano cortó la primera oreja tras un pinchazo y una estocada.
En el cuarto, Ponce ejecutó una faena de clase, profundidad y temple por ambos pitones. El toro tuvo una noble condición y calidad pero le faltó un puntito de fuerza. El valenciano le dio tiempos y toreó muy lento. Una delicia. Lástima que pinchara al primer encuentro que le redujo el premio a una oreja.
Roca Rey no pudo salir a estoquear el sexto. En su lugar, Ponce ejerció su función para inventarse una faena al toro más delicado del envío. Siempre en el tercio, cuajó una faena de suavidad y mucho temple. Mató de una estocada y cortó una oreja.
Cayetano sorteó en quinto lugar el toro más deslucido del encierro. El torero consiguió muletazos sin continuidad por la condición del animal. Lo más destacable fue el inicio de rodillas. Erró con la espada.
En segundo lugar salió un buen toro de Salvador Domecq con recorrido y prontitud. Cayetano le cogió el ritmo con los derechazos donde llegaron los mejores momentos de la faena. Los adornos finales metieron al público en la función. Falló con la espada y todo quedó en una ovación.
Plaza de toros de Andújar. Lleno en los tendidos. Toros de Salvador Domecq, bien presentados y de juego desigual.
Enrique Ponce, oreja, oreja tras aviso y oreja; Cayetano, ovación y silencio; Roca Rey, dos orejas y rabo en el único que estoqueó.
NOTICIA DE WW.MUNDOTORO.COM
Noticia de Pedro Ruiz
Fotos de Fidel Arroyo (aplausos)