Cinco meses después del último festejo y contra todo pronóstico, el martes mayor en Plasencia supuso la vuelta de los toros a Extremadura.
Con un lleno en los tendidos rompía el paseíllo con Enrique Ponce y Emilio de Justo en el cartel, para lidiar un serio encierro de El Torero.
Con aplomo, firmeza y una faena pulcra cargada de matices recibió Ponce al primero de la tarde. Ni “Viperino”, de El Torero”, fue claro, ni el de Chiva se sintió cómodo con el abre plaza. Silencio.
“Jarocho” fue el primero de lote del de Torrejoncillo. Repitió en el capote y tuvo movilidad y transmisión en la muleta. De Justo aprovechó cada tanda como si fuera la última. Más corto por el pitón izquierdo en una faena medida que rubricó con una estancada certera. Oreja con petición de la segunda, que no fue concedida por el palco.
El tercero pecó de movilidad y celo. No fue claro en sus embestidas y Ponce logró varias tandas inventadas por él. El de chiva tiró de oficio y maestría con muletazos por bajo. Ovacion.
El cuarto fue el animal más serio del festejo. Tuvo movilidad y transmisión que el extremeño aprovechó en el capote. En la muleta comenzó faena por doblones con una faena basada en el pitón derecho. Derechazos de escándalos. De cartel de toros. Sumó otra oreja al esportón.
El temple fue la clave del quinto. Un castaño serio, armónico y más montado que sus hermanos de encierro. Empezó de menos a más. Con muletazos sacados entre los pitones del animal. Con arrimon incluido de final de faena consiguió calar en los tendidos. La espada le privó de mayor triunfo y escuchó una atronadora ovación que le obligó a saludar en el tercio.
El sexto fue el mejor de todo el encierro. Dos orejas de peso y de ley. Una gran de rotundidad, temple y maestría. De Justo llegó a Plasencia como empezó en 2020: triunfando a lo grande. Cuatro orejas de buen toreo y de cante grande.
FICHA DEL FESTEJO:
Plaza de toros de Las Golondrinas, en Plasencia (Cáceres). Tres cuartos del aforo permitido. Corrida del Martes Mayor. Toros de El Torero, pareja de hechuras y bien presentada. El 1º, sin humillar, parado en la tercera tanda; el 2º, con movilidad y ritmo, pero sin entrega; el 3º, con movilidad y cierto carbón, pero nunca humilló; el 4º, con movilidad y de buen pitón derecho; el 5º, medido de fuerza y afligido en el último tercio, pero humilló con clase; y el 6º, encastado y exigente, humilló con clase y codicia, el mejor del encierro.
• ENRIQUE PONCE, silencio, ovación y ovación tras aviso.
• EMILIO DE JUSTO, oreja, oreja y dos orejas.
Incidencias: Tras el paseíllo, se guardó un minuto de silencio por todas las víctimas de la COVID-19, así como por la madre del sobresaliente del festejo, Miguel Ángel Sánchez. En banderillas, se desmonteró Manuel Gómez ‘El Pollo’, en el segundo.
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